
Diferencia entre emoción y sentimientos
Al hablar de inteligencia emocional conviene tener clara la diferencia entre emoción y sentimientos.
Las emociones
En el artículo de Introducción a las emociones ya se daba la definición de la RAE acerca de emoción con su doble acepción
- Alteración del ánimo, intensa y pasajera, agradable o penosa, que va acompañada de cierta conmoción somática.
- Interés, generalmente expectante, con que se participa en algo que está ocurriendo.
Conviene ampliar esta definición con dos más.
Daniel Goleman, uno de los padres de la Inteligencia emocional y autor del libro, publicado en 1995 con ese mismo título, define las emociones como:
Un impulso para la acción subjetivo y cognitivo que tiene unas manifestaciones físicas y un componente de voluntad.
Otros autores añaden una dimensión más bioquímica a esta definición estableciendo que una emoción es:
Un conjunto de respuestas neuroquímicas y hormonales que predisponen a reaccionar de cierta manera ante un estímulo.
Estos desencadenantes emocionales pueden ser internos, como lo son los recuerdos, ya sean internos, agradables (el primer beso), desagradables (la última discusión) o externos como puede ser una amenaza, detectar un peligro al conducir, etc.
Los sentimientos
Para encontrar la diferencia entre emoción y sentimientos se debe introducir la dimensión cognoscitiva.
Así, aunque los sentimientos también estén relacionados cerebralmente con el sistema límbico, centro cerebral encargado de procesar las emociones, ya intervienen otras partes del sistema nervioso.
Con ello aparece una evaluación consciente y con la participación de la voluntad puede existir un cambio de comportamiento.
Diferencia entre emoción y sentimientos
Esta diferencia entre emoción y sentimientos se basaría en que el sentimiento, como la emoción es algo irracional, sin embargo añade la capacidad de pensar. Esto hace que los sentimientos se puedan expresar, aunque siempre de una manera no racional. Por ello, el arte con su capacidad simbólica y abstracta resulta un vehículo de comunicación sentimental inigualable.
El estado de ánimo
El estado de ánimo o estado emocional se convierte en algo más estable. Es decir, algo de mayor duración y en este caso, de menor intensidad.
Además no ha de ser constante; por ejemplo una abuela puede tener un estado de ánimo de tristeza por ser viuda y encontrarse sola, pero puede tener momentos de alegría cuando la visitan sus nietos.
Trastorno emocional
Si además de prolongarse en el tiempo, este estado de ánimo se convierte en perjudicial para la personas se puede hablar de un trastorno. Una tristeza que se instaura y que resulta desadaptativa se puede convertir en una depresión. Un miedo continuado se torna en ansiedad, etc.
El temperamento
El temperamento se relaciona con la propia naturaleza de la persona. Forma parte de su identidad y si no pone conciencia la persona de manera natural tenderá a reaccionar y acondicionar su comportamiento según su temperamento.