Dejar el mapa y entrar directamente al territorio
Y, ¿si se pudiera dejar el mapa y entrar directamente al territorio?
El «mapa no es el territorio» de la PNL
Todos aquellos que hayan entrado en contacto con la Programación No lingüística, PNL habrán escuchado la idea de que
El mapa no es el territorio
Esta frase procede de Alfred Korzybski, padre de la semántica general. Parece ser que, durante la Primera Guerra Mundial, Korzybski cayó en una fosa que no se hallaba descrita en su mapa, pero, obviamente, si estaba en su territorio.
A partir de esa experiencia propia, acuñó la frase de que el mapa no es el territorio. Crea así una nueva forma de relación con las palabras al identificarlas como conceptos que no se ajustan en su totalidad a las ideas que han de definir.
Por ejemplo, al escuchar la palabra libertad cada persona conectará con una realidad diferente.
Esto hace que en cualquier encuentro y en cada conversación dos, o más personas perciban algo diferente ante una conversación y un hecho.
En el coaching convencional
En las formaciones de coaching existe un poderoso mandato que se repite como un mantra ante cualquier sesión práctica:
No metas mapa
Esta advertencia indica a aquel que está llevando una sesión de coaching que no interprete desde su realidad, desde su experiencia. Ha de lograr empatizar con el cliente sin mediatizar o condicionar aquello que está escuchando.
Y así la PNL y otras corrientes de coaching derivadas de ella trabajan desde esta premisa.
De esa manera, ayudan a la persona a identificar su mapa, a tomar conciencia de como desde él se interpreta la realidad y a tratar de facilitar las relaciones interpersonales en la clave de que cada persona va con su “programa” y que, por tanto, muchas de las discusiones acerca de diferentes visiones de la vida resultan innecesarias, estériles y perjudiciales.
Además, se ayuda a la persona a flexibilizar y a poder tener un mayor abanico de mapas para poder planificar distintos caminos en su proyecto de convertirse en la mejor versión de uno mismo. Esto está ayudando en su desarrollo personal a una gran cantidad de gente
Pero, la idea de que El mapa no es el territorio no deja de ser un mapa de la PNL.
Saltar al territorio
La pregunta sería ¿Y, si existiese alguna forma de caminar por el territorio?
Hace ya más de un siglo Rudolf Steiner, filósofo austriaco desarrolló su Teoría del conocimiento, gnoseología.
Teoría del conocimiento
Esta teoría describe los diferentes pasos para entrar en contacto con el mundo:
- Mediante nuestros sentidos entramos en contacto con el mundo generando una interacción, una experiencia
- Posteriormente, buscamos en nuestro interior, (mente, alma o como se quiera identificar) un concepto ya conocido que pueda identificar a esa experiencia llevada a cabo por nuestros sentidos. Algo que se lleva a cabo mediante nuestro pensar.
- El fruto de la unión de la experiencia con el concepto creará una representación que será la que quede fijada en nuestra mente.
A partir de ese momento, cada vez que tratemos de recordar la primera experiencia a lo que tendremos acceso será a nuestras representaciones, no a esta en sí. Es decir, contactaremos con nuestro mapa.
De esta manera, y debido a que resulta más sencillo a lo conocido que tener la experiencia de conocimiento recurriremos a la representación, esto es lo que se puede denominar conciencia cotidiana.
El asombro, la señal, el indicador de un acto de conocimiento
En la actividad diaria resulta difícil saber cuando estamos en una nueva experiencia de conocimiento o cuando, de forma más o menos consciente, estamos recurriendo a relacionar conocimientos ya existentes en nosotros.
El asombro puede ser uno de los mejores indicadores de estar teniendo un conocimiento nuevo. Algo de lo que nos damos cuenta, que pensamos y que no estaba hasta ahora dentro de nosotros. Esto puede ser un árbol de nuestra calle en el que nunca habíamos reparado. O aquel compañero, compañera, que nunca nos había llamado la atención y que puede estar a punto de convertirse en una relación que defina mi vida.
La experiencia pura
Diferir el momento entre la experiencia sensorial y la conceptualización de esta puede permitir ratos de “paseo por el territorio”.
Esta habilidad se puede despertar mediante ejercicios sensoriales que permitan entrar en contacto con el mundo, no desde lo aprendido, sino desde el asombro.
Este aprendizaje no debe ser desde lo conceptual, no es un tema para ser pensado, sino para ser experimentado y vivido.
Esta experiencia de asombro posibilita una nueva forma de relacionarse
¿Cuántas veces nos relacionamos con otras personas no desde lo que está sucediendo en este momento o de lo que nos está contando aquí y ahora, sino desde las representaciones que tenemos de lo que nos va a decir?
¿Con qué frecuencia estamos elaborando la respuesta a lo que nos está diciendo, no escuchando, sino por la imagen que tenemos distorsionada por nosotros de lo que esperábamos que iba a contar?
Y, ¿si fuera posible tener un diálogo verdaderamente novedoso, donde cada palabra, cada idea que nos regalara el otro generara un verdadero asombro? ¿Una nueva experiencia?
Con perseverancia, se puede ejercitar el abandonar nuestros juicios y prejuicios y abrirse a una escucha generativa.
El asombro en el coaching
El hecho de contarle a un coach una experiencia vivida y que este “se haga de nuevas”, muestre interés, puede llevarte a no relacionarte con el hecho narrado desde las representaciones, sino que, al elaborarlo de nuevo, puedes encontrar asombros que despierten nuevas posibilidades.
Es una nueva manera de relacionarse con lo vivido, que posibilita encontrar palancas de cambio para el futuro.
Si quieres tener una experiencia de coaching de esta manera contacta con nosotros en CoachingBiográfico. Podrás ver la cantidad de acontecimientos que has vivido y que te han traído las claves para tu futuro.